EP. – El Barcelona descontó uno de los cinco triunfos que tenía en mente para alzar el título en la Liga Española al superar 3-1 Leganés en el Camp Nou, un choque que decidió Leo Messi con un triplete.
El argentino no tuvo piedad de los del sur de Madrid, como el año pasado. En aquella ocasión, con un penalti en el 89′, los de Asier Garitano se marcharon sin sacar tajada. De nuevo, con la cabeza alta pero sin hacer daño al líder de la competición, el Lega sucumbió a un Barça lanzado cuando Messi se lo propone e invicto en 38 jornadas seguidas, récord de la liga que ostentaba en solitario la Real Sociedad de finales de los 70.
El de Rosario anotó de falta directa y poco después con agilidad entre los defensores para definir dentro del área. Un 2-0 a la media hora con el que supo lidiar el conjunto pepinero, capaz de recortar distancias tras el descanso por medio de El Zhar. En medio de nuevo del debate sobre la calidad de su juego, el Barça despertó con Messi, encargado de sentenciar ya en el 87′.
La estrella azulgrana aclara las cuentas a Ernesto Valverde, quien pedía a los suyos cinco victorias para el alirón. La primera cayó con un derbi entre Real Madrid y Atlético a la vista, para buscar la tajada mayor este fin de semana. Echó de menos a Busquets en el centro del campo un Barça que dejó buenas sensaciones en el primer tiempo, pero que las empañó en el segundo.
Al ritmo de Messi
A pesar de encarrilar el pase a semifinales de la Liga de Campeones ante la Roma (4-1), el debate sobre el fútbol de Valverde volvió a la palestra. El Barça quiso mostrar una versión aseada y encerró a un Lega incapaz de probar a Ter Stegen pese a la lucha casi en solitario de Amrabat. Las pérdidas visitantes en la salida eran un caramelo para un Barça rápido con Messi, Suárez y Dembélé.
No contribuyó mucho Coutinho, aunque sí dejó muestras de su gran disparo para probar a Cuéllar. El uruguayo también perdonó ante el meta rival, pero Messi encontró la red en un disparo de falta directa. Poco después, en asistencia del brasileño, penetró entre los centrales para hacer el 2-0. Tras el descanso levantó el pie el Barça, un mal negocio ante un rival que nunca pierde la cara a los partidos, como ya demostró precisamente en el Camp Nou.
El Zhar se encargó de dar moral a los suyos, pero Beauvue volvió a perdonar. Los problemas en la pegada del Lega permitieron al Barça salir airoso de media hora de pájara. Valverde recompuso su once con la entrada de Alba e Iniesta, pero fue Messi quien se encargó de cerrar el partido, de nuevo como equilibrista entre los centrales. Descuenta jornadas el Barça, de la mano de un Messi que iguala a Salah en 29 tantos, por la Bota de Oro de Europa.
