EP. – El Real Madrid se llevó los tres puntos de Mestalla este sábado gracias a una contundente victoria 1-4 con dos goles de penal de Cristiano Ronaldo, y una gran actuación de Keylor Navas, duelo de la jornada 21 de la Liga Española.
Los locales, descontentos con el árbitro en el primer tiempo, no supieron aprovechar el arreón al inicio de la segunda mitad y terminaron pagando la falta de puntería. Con esta victoria, el Real Madrid se queda a tan solo dos puntos del tercer puesto Valencia, con un partido menos. Los blancos saltaron ante un rival directo a cambiar la tendencia de una temporada que encajó un sonoro golpe tras la eliminación de Copa ante el Leganés.
El partido comenzó sin un dominador claro, con más intensidad que fútbol, y ambos equipos buscando dañar al rival con salidas veloces tras recuperación de balón. En una de estas salidas fulgurantes, una combinación entre Marcelo y Cristiano Ronaldo terminaba con el portugués derribado claramente en el área por Montoya.
El colegiado señaló el punto de penalti y el ‘siete’ adelantaba a los visitantes al cuarto de hora de partido. También desde los once metros llegó el segundo tanto merengue. De nuevo Montoya, esta vez de forma menos clara, cometió penalti tras empujar a Benzema en un salto. Cristiano no perdonó y puso tierra de por medio.
Con la grada enfurecida por la actuación de Estrada Fernández, Rodrigo tuvo lo más clara para los suyos a un minuto del descanso, pero su remate a portería vacía se marchó por encima del larguero. Una vez más, los de Zidane bajaron el ritmo en la segunda mitad, y el conjunto ‘che’ se hizo con el dominio total del encuentro.
Los de Marcelino se volcaron sobre el área blanca, y encontraron la recompensa en la cabeza de Santi Mina, que recortaba distancia a la salida de un córner. El acoso sobre el arco de Navas no cesó, y solo un milagroso pie del ‘tico’ tras disparo de Parejo evitó el empate. Zidane dio entrada a Asensio y Lucas Vázquez, y los de Concha Espina consiguieron anestesiar el ímpetu local.
En los minutos finales, dos destellos de calidad de los jugadores madridistas sentenciaron el partido y pusieron el 1-4 final. Primero fue Marcelo quien culminó una jugada personal para batir a Neto, y después hizo lo propio Kroos con un preciso disparo raso tras un taconazo del recién incorporado Kovacic. El Madrid se dio una alegría para aspirar a reconducir su fútbol pensando en el PSG.
